A pesar de los magníficos avances que los sistemas operativos han tenido en algunos aspectos, otros han quedado relegados. Sin una causa cierta o concreta, lo cierto es que a día de hoy sigue siendo bastante lento iniciar cualquier sistema operativo. Ubuntu 10.04, por ello, tiene como objetivo lograr iniciar el ordenador en solo 10 segundos.
Cada una de las principales distribuciones de Linux ha encarado por su parte una serie de optimizaciones, algunas más específicas (el soporte a una variedad más amplia de tarjetas wi-fi) y otras más generales a Linux, como el tiempo de inicio, algo que a pesar de la gran superación que se viene dando en el hardware (contar ya con procesadores de doble o triple núcleo es norma) no se ve plasmado en el inicio del sistema.
Si tenemos en cuenta lo logrado desde Ubuntu 8.10 hasta Ubuntu 9.04 Jaunty Jackalope, donde se inicia en apenas 25 segundos, el futuro parece promisorio. Pero ciertamente hay mucho trabajo por delante, y lo bueno es que los desarrolladores ya tienen claro lo que hace falta para iniciar el servidor gráfico Xorg mucho más rápido.
Tan rápido que ni siquiera se mostrará la pantalla de splash que cada distribución nos pone para “vestir” el inicio, mientras detrás se van iniciando uno a uno los servicios. Muchos seguirán diciendo que lo ideal es no tener que iniciar tantas veces el ordenador, y que a veces pasan días sin apagarlo o reiniciarlo. Pero la idea del inicio instantáneo del sistema por fin parece estar dejando de ser una utopía.
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